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La familia Vargas Solera, compuesta por dos adultos y tres niños, lo perdió todo tras el voraz fuego que arrasó su casa en la vereda Las Colinas. Autoridades investigan las causas. |
La residencia pertenecía a la familia Vargas Solera, integrada por dos adultos y tres menores de edad, quienes quedaron en la calle, sin un techo y con las manos vacías. Según vecinos, el fuego comenzó con fuerza inusitada y en cuestión de minutos convirtió la vivienda en un amasijo de escombros humeantes.
“Escuchamos como si algo explotara, y al salir ya todo estaba ardiendo. No se pudo hacer nada”, relató un campesino que presenció la escena desde su parcela.
El incendio, cuyas causas aún son materia de investigación, ha dejado a la familia en una situación crítica. Lo perdieron todo: camas, ropa, documentos, útiles escolares… la vida misma reducida a cenizas.
Mientras las autoridades intentan esclarecer el origen del fuego, la comunidad se ha volcado en solidaridad, organizando recolectas para ayudar a los afectados. Ropa, víveres y hasta cuadernos empiezan a llegar como un bálsamo en medio del desastre.
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