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La operación militar se desarrolló en zona rural de Cáceres y Tarazá. También fueron capturados dos presuntos integrantes de la estructura y se incautó material de guerra.

Ocho presuntos integrantes del Clan del Golfo, algunos de ellos considerados “joyitas” dentro de la estructura criminal por su historial de sangre y poder en las finanzas del narcotráfico, fueron abatidos en medio de bombardeos coordinados por las Fuerzas Militares en el Bajo Cauca antioqueño.


La ofensiva, que inició en la madrugada del lunes 7 de abril, se desarrolló en las zonas rurales de Cáceres y Tarazá, puntos estratégicos en la retaguardia del grupo armado ilegal que controla corredores de coca y armas hacia el sur de Córdoba y Urabá.


El operativo fue liderado por la Fuerza Aeroespacial de Colombia, encargada de los bombardeos de precisión, mientras tropas del Ejército y unidades de la Policía Nacional ingresaban por tierra en medio de combates intensos. En medio de la operación, también se logró la captura de dos supuestos miembros de la organización, así como la incautación de fusiles, municiones, radios de comunicación y prendas de uso privativo de las fuerzas armadas.


Fuentes militares confirmaron que entre los abatidos estarían hombres cercanos a alias Chiquito Malo, cabecilla del Clan del Golfo que sigue siendo uno de los objetivos de alto valor del Estado colombiano. “Se trataba de criminales curtidos, con amplio prontuario y experiencia en el manejo de laboratorios de droga y control armado de las comunidades”, indicó un oficial que participó en la operación.


A través de su cuenta en la red social X, el ministro de Defensa, general (r) Pedro Sánchez, anunció que los operativos continuarán en la región:


“No pararemos hasta recuperar el control territorial, hasta lograr la seguridad y la paz que fue alterada por grupos criminales, hoy carteles del narcotráfico, por más de medio siglo”.


El área del Bajo Cauca, históricamente asediada por grupos ilegales, sigue siendo un escenario de confrontación donde los narcos mutaron de milicianos a señores feudales. Hoy, esa realidad está siendo sacudida a punta de fuego desde el aire.


La operación, respaldada por la Fiscalía, se mantendrá en las próximas horas, pues inteligencia militar advierte que más hombres armados se estarían replegando hacia otras veredas del sur de Córdoba. La cacería continúa.

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