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El cordobés de 28 años y con apenas dos meses en la Policía, fue atacado a tiros durante una actividad religiosa en Lourdes. 
Un crimen atroz perturbo la tranquilidad de Lourdes, Norte de Santander, durante la noche del viernes 18 de abril. En medio de una procesión de Semana Santa, el patrullero Andrés David Padilla Mejía, oriundo del municipio de Cotorra, Córdoba, fue asesinado a sangre fría por sicarios que lo interceptaron y le dispararon en repetidas ocasiones.


Padilla, de 28 años, llevaba apenas dos meses en la institución. Estaba cumpliendo labores de acompañamiento y seguridad a la comunidad cuando fue atacado sin mediar palabra. Gravemente herido, fue trasladado de inmediato a un centro asistencial local y posteriormente remitido a Gramalote, donde lamentablemente falleció debido a la gravedad de las heridas.


La noticia causó profunda indignación tanto en su tierra natal como en el cuerpo policial, donde era considerado un joven comprometido y de buen desempeño. La Policía Nacional anunció la conformación de un equipo especial de investigación criminal para dar con los autores materiales e intelectuales del crimen.


Además, en coordinación con el Ministerio de Defensa y la Gobernación de Norte de Santander, se ofreció una recompensa de hasta 100 millones de pesos a quien brinde información que permita ubicar a los responsables de este homicidio.


Este caso se suma a la preocupante racha de violencia que ha cobrado la vida de varios uniformados en diferentes zonas del país. Las autoridades reiteraron el llamado a la ciudadanía para colaborar con cualquier dato que conduzca a la captura de los criminales.

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