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| Según fuentes cercanas, Castro se integró a las filas del ejército ucraniano como parte de un grupo de combatientes extranjeros que han llegado al país |
La noticia de su muerte, ocurrida el pasado fin de semana, tomó por sorpresa a sus familiares en Fundación, Magdalena, quienes confirmaron que Ronald había viajado hace seis meses en busca de mejores ingresos económicos, pese a los riesgos que implicaba unirse a un conflicto internacional.
Según fuentes cercanas, Castro se integró a las filas del ejército ucraniano como parte de un grupo de combatientes extranjeros que han llegado al país europeo para apoyar la defensa ante la invasión rusa. El magdalenense habría muerto durante una operación militar que resultó en fuertes enfrentamientos en una zona controlada por las fuerzas rusas.
El cuerpo de Ronald permanece en territorio ucraniano, y su familia ha iniciado gestiones con el Ministerio de Relaciones Exteriores para repatriar sus restos y darle cristiana sepultura en su tierra natal. Sin embargo, el proceso ha sido lento y complejo debido a las condiciones del conflicto armado.
"Él se fue buscando un mejor futuro. Sabía que había riesgos, pero no quería seguir en Colombia sin oportunidades", expresó uno de sus familiares, quien pidió la solidaridad de la comunidad para agilizar el proceso de repatriación.
La participación de colombianos en el conflicto ucraniano no es un hecho aislado. Se estima que varios connacionales se han unido como combatientes, atraídos por los beneficios económicos que ofrecen las fuerzas ucranianas. Sin embargo, la mayoría lo hace asumiendo riesgos extremos, con escasas garantías de seguridad.
Por ahora, los familiares de Ronald Castro esperan poder recibir su cuerpo y despedirlo en su tierra natal, donde será recordado como un hombre valiente que, en medio de la adversidad, buscó nuevas oportunidades lejos de casa.
El militar oriundo de Pivijay, Magdalena, cayó durante un enfrentamiento en la guerra entre Ucrania y Rusia
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