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| El presidente estadounidense impone un arancel del 25% y suspende visas para funcionarios colombianos. |
La medida surge después de que Petro rechazara recibir a los migrantes deportados desde Estados Unidos, argumentando que no se les estaba brindando un trato "digno". Esta decisión, que busca proteger a los colombianos afectados por las nuevas políticas migratorias de la administración Trump, ha escalado las tensiones diplomáticas entre ambos países. Además de los aranceles, el gobierno estadounidense anunció la suspensión de visas para funcionarios del Gobierno colombiano, elevando aún más la presión sobre el presidente Petro para reconsiderar su postura.
Según fuentes oficiales de la Casa Blanca, las sanciones buscan forzar al gobierno colombiano a aceptar el retorno de los migrantes colombianos deportados desde Estados Unidos. Este giro en las relaciones diplomáticas ha generado preocupaciones en Colombia, ya que las exportaciones colombianas hacia Estados Unidos representan alrededor del 30% de su comercio exterior, y los aranceles podrían desencadenar una desaceleración económica significativa.
Analistas económicos advierten que esta crisis diplomática podría tener efectos perjudiciales a largo plazo para la economía colombiana, especialmente en sectores dependientes del comercio con Estados Unidos. La medida se produce en un momento de creciente presión sobre Colombia en términos migratorios, lo que plantea nuevos desafíos para la política exterior y económica del país.
El presidente estadounidense impone un arancel del 25% y suspende visas para funcionarios colombianos.
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