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El congresista del Centro Democrático descalificó la instalación artística en el Congreso y generó una fuerte polémica entre víctimas y defensores de la memoria histórica.
El congresista Miguel Polo Polo ha desatado una nueva controversia al rechazar públicamente una instalación artística en el Congreso de la República que rinde homenaje a los 6.402 jóvenes víctimas de los llamados "falsos positivos". La obra, compuesta por decenas de botas de caucho, simboliza a los jóvenes asesinados y presentados falsamente como guerrilleros caídos en combate durante el gobierno de Álvaro Uribe Vélez.


En un video difundido en sus redes sociales, Polo Polo criticó la cifra oficial de víctimas y calificó la instalación de "basura", indicando que las botas deberían ser retiradas y echadas en un basurero. El congresista, de inmediato, procedió a introducir algunas de las botas en una bolsa de basura, un gesto que fue aplaudido por sus seguidores pero que causó indignación entre los familiares de las víctimas y defensores de derechos humanos.


Jaqueline Castillo, presidenta de la organización Madres de Falsos Positivos (Mafapo), condenó el acto y lo calificó como un “ataque a la memoria histórica de Colombia”, acusando al congresista de revictimizar a las madres de los jóvenes asesinados. Castillo y otros activistas exigen una sanción disciplinaria y una disculpa pública por parte de Polo Polo.


La instalación fue promovida por la representante Dorina Hernández como parte de un esfuerzo para visibilizar este oscuro capítulo de la historia nacional y hacer un llamado a la justicia y la verdad. A pesar de que algunos militares han confesado su participación en estos crímenes ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), aún no se han dictado sentencias definitivas.



Este incidente reaviva la división política y social en Colombia en torno a la memoria de las víctimas del conflicto armado, un tema aún doloroso y lejano a la reconciliación plena.


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