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| El animal recorrió tres kilómetros junto al cortejo fúnebre en San Pelayo, sorprendiendo a la comunidad. |
Un curioso y emotivo suceso sorprendió a los habitantes del corregimiento de Sabananueva, en el municipio de San Pelayo, cuando una lechona se unió al cortejo fúnebre de una reconocida bailadora de fandango y la acompañó en su último recorrido hasta el cementerio.
El singular acontecimiento tuvo lugar el pasado martes, cuando la lechona, sin que nadie la guiara, siguió la procesión fúnebre durante tres kilómetros, mostrando un comportamiento que dejó a todos los presentes asombrados. Tras el entierro, el animal regresó por la misma carretera hasta su lugar de origen, como si entendiera que su recorrido había llegado a su fin.
El hecho ha causado asombro en la comunidad, que no deja de comentar sobre esta rara manifestación de lealtad o conexión, un suceso que parece más propio de una historia folklórica que de la vida cotidiana. Mientras tanto, los pobladores siguen asombrados, tratando de dar explicación a este enigmático acto de la naturaleza.
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