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 A 10 años del crimen, familiares denuncian fallas del sistema judicial tras la fuga de Jesús Henao y otros implicados en el homicidio del funcionario público.

El caso del asesinato de Jairo Zapa Pérez, funcionario público de Córdoba asesinado en 2014, sigue siendo un símbolo de la lucha por la justicia. Esta semana, la familia de la víctima alzó su voz para denunciar que los responsables del crimen, entre ellos Jesús Henao, señalado como autor intelectual, están prófugos tras beneficiarse de medidas como la detención domiciliaria.


Emma Cecilia Quijano Pérez, familiar de Zapa, criticó duramente la falta de control del sistema judicial y penitenciario, que permitió la fuga de los condenados. "Han pasado más de 10 años y la justicia sigue siendo una promesa incumplida", afirmó en un comunicado.


La ausencia de un pronunciamiento oficial por parte de la Fiscalía y el INPEC agrava la situación, mientras que el núcleo familiar del funcionario asesinado sigue desintegrado y forzado al exilio por amenazas constantes.


El clamor por justicia no cesa, y la exigencia es clara: recaptura inmediata de los responsables y explicaciones sobre las fallas que permitieron su escape.

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