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Los tres militares, entregaron coordenadas erróneas para ubicar la unidad, lo que permitió al ELN ejecutar el ataque.
Tres miembros del Ejército Nacional fueron capturados tras presuntas fallas en el operativo realizado en Anorí, Antioquía, el pasado 21 de noviembre, donde un ataque del ELN dejó cinco militares muertos, entre ellos dos soldados cordobeses, y tres más heridos. El atentado se produjo cuando las tropas, encargadas de proteger a los reinsertados en la región, fueron atacadas con artefactos explosivos improvisados por el grupo armado.


Según las investigaciones, los tres militares, un teniente, un sargento y un cabo primero, entregaron coordenadas erróneas para ubicar la unidad, lo que permitió al ELN ejecutar el ataque. Los responsables, entre ellos el teniente Juan Daniel Hernández, quien también resultó herido, fueron detenidos por falsedad ideológica en documento público y desobediencia.


El ataque provocó la muerte de cinco uniformados, incluidos los soldados cordobeses Fabián José Regino Mora y Carlos Andrés Ramos Martínez, así como Yoiser David Redondo Arias, Iván Darío Reina Carabalí. Los tres detenidos deberán explicar su accionar ante la justicia penal militar, mientras las autoridades siguen investigando posibles vínculos con la guerrilla.


Este ataque resalta la grave situación de inseguridad en la región y ha reavivado el debate sobre la efectividad de las operaciones militares en zonas de alta presencia del ELN y otros grupos armados. La investigación avanza a la par con las negociaciones de paz del Gobierno con el ELN, que, aunque congeladas desde principios de 2024, siguen siendo un tema de discusión en la política nacional.


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