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El testimonio revelador se presentó casi dos meses después del crimen, tras la asesoría de un abogado, y apunta directamente a Yofran Orozco Perea.
La Fiscalía Segunda Especializada de Sincelejo ha solicitado la medida de aseguramiento intramural para los implicados en el asesinato del rector y gestor cultural Armando Rivero Manjarrez, gracias al testimonio de un ciudadano que, bajo juramento, ha señalado directamente a Yofran Orozco Perea, hijastro de la víctima. 


El testigo, quien realizaba trabajos para la pareja de Rivero, Juana Perea, relató que Yofran le confesó haber asesinado a su padrastro, lo que desató una serie de eventos que se remontan a la noche del 12 de julio.


Según el testimonio presentado durante la audiencia del 8 de octubre, Yofran se presentó en la casa del testigo y le pidió que manejara la camioneta Duster del rector, revelando que había cometido el crimen y que el cuerpo de Rivero se encontraba en el maletero del vehículo. 


A pesar de las insistencias de Yofran, el testigo se negó a participar en la situación y regresó a su casa en un mototaxi. Posteriormente, el testigo también relató un encuentro posterior en el que Yofran, aparentemente sin preocupaciones, le confirmó que había desechado el cuerpo de Rivero en un puente.


El relato de Yofran revela un trasfondo de resentimiento hacia su padrastro, quien, según el testigo, nunca le proporcionó ayuda económica a Juana Perea. Además, el testigo comentó que Yofran justificó su acción al señalar que el rector no había sido generoso con su madre. La Fiscalía investiga ahora las circunstancias que rodearon este macabro suceso, mientras la comunidad espera justicia por el trágico asesinato de Armando Rivero Manjarrez.



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