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 El amarrador de toros revela cómo su compromiso con un contrato evitó que acompañara a Urueta en el trágico momento, mientras la comunidad sigue de luto y busca justicia.

Este martes, Sincelejo se despidió con profundo dolor de Esteban Rafael Urueta González, el destacado ganadero asesinado en la zona rural entre los municipios de Ciénaga de Oro y Chimá, Córdoba. El sepelio, celebrado en el cementerio ‘La Esperanza’, se convirtió en un acto de conmemoración y luto por la vida de un hombre altamente respetado en su comunidad.


Durante las honras fúnebres, se revelaron detalles conmovedores sobre los momentos previos al trágico suceso. Alejandro Cali Contreras, reconocido amarrador de toros, compartió un desgarrador testimonio: “Mi compadre Esteban Urueta me invitó a hacer un inventario del ganado que le estaban robando. Me rogó que lo acompañara a la finca, pero no pude ir porque tenía un contrato en las corralejas de El Difícil (Magdalena). No me canso de llorar. Esto no hubiese pasado, o tal vez yo también hubiese caído.”


La declaración de Contreras subraya la gravedad del robo que llevó al asesinato de Urueta y resalta la desesperación que enfrentó el ganadero en sus últimos momentos. La comunidad y las autoridades continúan buscando respuestas, mientras el dolor por la pérdida de un líder regional es evidente en cada rincón de Sincelejo.



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