Daniel Ospina Gaviria, de 21 años, fue víctima de un homicidio en Puerto Libertador, donde su cuerpo sin vida fue descubierto el miércoles 28 de diciembre en la zona rural. El crimen fue acompañado por un macabro detalle: los perpetradores dejaron un letrero junto al cadáver, indicando "Por robar motos".
El lugar del trágico hallazgo fue a la altura de la entrada a la mina Las Palmeras, dando a entender que el móvil del asesinato estaba vinculado al presunto robo de motocicletas.
Sin embargo, el padre de la víctima, Esau Ospina, desmintió la acusación a través de un video, declarando que su hijo no era un ladrón de motos y que sufría de un trastorno mental. Según la versión del progenitor, habían solicitado previamente al hospital del municipio el traslado de Daniel a un centro adecuado para su tratamiento, pero no habían recibido respuesta.
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