Un alarmante episodio de violencia estalló en el metro de Nueva York durante una travesía rutinaria, quedando grabado en un vídeo que se ha vuelto viral en las redes sociales. La causa de esta trifulca aparentemente banal fue que un pasajero se quedó dormido apoyado en el hombro de otro, desencadenando una serie de eventos que sorprendieron a todos los presentes.
El conflicto se desencadenó cuando uno de los pasajeros involucrados, quien se había quedado dormido y apoyado en el hombro de su vecino, fue objeto de duras críticas por parte de este último. Visiblemente molesto, el pasajero enojado comenzó a señalar acusatoriamente a otro viajero que estaba situado frente a ellos.
En medio de un tenso intercambio de palabras, el pasajero que se había sentido agraviado expresó su descontento en un tono elevado y en dos idiomas diferentes: inglés y español. En español, exclamó: "Te estás durmiendo, yo no soy tu puta almohada. Si quieres dormir, duérmete al lado de él (refiriéndose a la persona frente a ellos), que están durmiendo los dos, pero yo no soy tu puta almohada". .
La situación se escaló rápidamente cuando el pasajero indignado propinó tres brutales codazos al joven que había descansado en su hombro, resultando en que la cabeza de este último se golpeóa contra la ventanilla del vagón y quedó visiblemente aturdido.
Sin perder tiempo, el pasajero que había estado frente a los dos contendientes se abalanzó sobre el agresor y se desató una pelea física que duró varios segundos, con golpes intercambiados y sin intervención de ningún otro pasajero. La reacción de la mayoría de los testigos fue mantenerse alejados de los protagonistas de la riña, buscando evitar cualquier involucramiento en el violento altercado.
Este hecho en el metro de Nueva York, que se originó por una situación aparentemente trivial como quedarse dormido en el hombro de otro pasajero, ha puesto de manifiesto la creciente tensión y la falta de tolerancia en situaciones cotidianas. La viralización del video ha destacado la importancia de mantener la calma y buscar soluciones pacíficas para evitar que las diferencias personales se desemboquen en enfrentamientos violentos en espacios públicos.
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