La Secretaría de Salud de Montería llevó a cabo una inspección en el barrio Los Álamos, ubicado detrás del almacén SAO, tras recibir denuncias de vertimiento ilegal de aguas residuales. Aunque no se encontraron evidencias de que el SAO esté vertiendo aguas residuales, se descubrió la presencia de varias tuberías sin identificación que podrían ser la fuente del problema.
La autoridad sanitaria ha requerido los planes hidrosanitarios del SAO y ha solicitado apoyo a la Secretaría de Infraestructura para identificar al responsable del vertimiento de aguas putrefactas en la calle. Según la ingeniera ambiental a cargo de la inspección, ningún establecimiento o residencia puede verter aguas residuales a las calles si hay alcantarillado disponible.
El SAO ha manifestado que cuentan con un plan de limpieza para el canal ubicado en la parte trasera del negocio. La Secretaría de Salud ha clasificado el caso como prioritario y se espera que la investigación técnica determine la fuente del agua contaminante y los olores desagradables lo antes posible.
Es fundamental identificar y solucionar el problema del vertimiento de aguas residuales para garantizar un ambiente saludable y mejorar la calidad de vida de los residentes en el barrio Los Álamos. La comunidad espera que las autoridades competentes tomen las medidas necesarias para resolver esta situación y prevenir futuros episodios de contaminación.
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