En las últimas horas, se ha generado gran conmoción tras hacerse virales en las redes sociales fotografías que muestran a John Poulos, de 35 años, con visibles moretones y contusiones en su rostro. Estas imágenes han revelado que Poulos habría sido víctima de una golpiza al interior de la cárcel La Picota, en Bogotá, donde se encuentra recluido desde hace cinco meses.
Las fotografías muestran a Poulos con marcas en su frente, donde sobresale un raspón, y en su ojo derecho. Las lesiones evidentes en su rostro han generado preocupación y reacciones de indignación por parte de la opinión pública.
Según fuentes del Instituto Nacional Penitenciario (INPEC), Poulos estuvo involucrado en una riña en el pabellón de alta seguridad de la cárcel. Sin embargo, se ha aclarado que dicha agresión no es reciente, sino que ocurrió hace más de 20 días.
Las autoridades del INPEC informaron que Poulos sufrió lesiones durante una disputa relacionada con asuntos de convivencia en el patio de la prisión. Aunque se asegura que se encuentra en buen estado de salud, resulta preocupante el hecho de que haya sido objeto de violencia mientras cumple su condena.
Cabe recordar que John Poulos es señalado como presunto responsable del asesinato de la joven Valentina Trespalacios en Bogotá. El cuerpo de la víctima fue encontrado en un contenedor de basura en la localidad de Fontibón el pasado 22 de enero. Poulos enfrenta cargos por feminicidio agravado y por el ocultamiento, alteración y destrucción de pruebas para desviar o retrasar la investigación. En caso de ser condenado, podría enfrentar una pena de hasta 50 años de cárcel.
Inicialmente, Poulos estuvo recluido en una celda primaria mientras se determinaba su ubicación definitiva en el centro penitenciario. Posteriormente, fue trasladado al pabellón de extraditables, donde ocupa una celda privada con baño y un pequeño armario, según la aprobación del director del INPEC.
En mayo pasado, el abogado de Poulos solicitó la nulidad del proceso argumentando presuntas irregularidades en el procedimiento de captura. Además, se alegó que hubo fallas en la traducción durante el inicio de la diligencia, lo que dificultaba que el acusado entendiera lo que estaba sucediendo.
El caso de John Poulos ha generado gran atención mediática y judicial debido a la gravedad de los cargos en su contra y a las circunstancias en las que ocurrió el crimen. La golpiza sufrida en la cárcel ha puesto de manifiesto la importancia de garantizar la seguridad y el respeto de los derechos de los internos en el sistema penitenciario.
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