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El mirador turístico recientemente inaugurado en Playa Blanca, municipio de San Antero, ha sufrido un grave deterioro en menos de un mes desde su finalización, lo que ha generado preocupación entre los residentes locales. La calidad de la obra ha sido cuestionada y la comunidad exige respuestas por parte de las autoridades pertinentes.


Los habitantes de San Antero han denunciado el deterioro de la estructura, documentando y compartiendo imágenes que evidencian la formación de socavones y desprendimientos en las bases laterales del mirador.


Ante esta situación, la comunidad ha solicitado respuestas tanto al interventor de la obra como al alcalde de San Antero, Lormandy Martínez. La construcción del mirador contó con una inversión de 7.800 millones de pesos, con una contribución mayoritaria por parte de EnTerritorio, pero también con una aportación económica del gobierno municipal.


A pesar de reconocer que el proyecto ofrece una vista impresionante de la Bahía de Cispatá en el Golfo de Morrosquillo, los denunciantes consideran necesario llevar el tema al Concejo Municipal para llevar a cabo un debate de control, ya que se trata de fondos públicos comprometidos en la construcción.


En este tipo de proyectos recién entregados, las pólizas de garantía aún están vigentes, lo que permitiría su aplicación en caso de que el contratista no realice las reparaciones necesarias frente al deterioro anticipado de la estructura.





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