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La Policía Metropolitana de Montería realizó un importante decomiso de licor adulterado en los alrededores del centro recreacional Tacasuan. En total, se incautaron 21 unidades de aguardiente que pretendían ser comercializadas de manera ilegal.


El valor del licor confiscado asciende aproximadamente a un millón de pesos. Entre las botellas y cajas incautadas se encontraban diferentes presentaciones de aguardiente Antioqueño, tanto con azúcar como sin azúcar, en tamaños de 1.05 litros, 1 litro, 750 ml y 375 ml.


El operativo se llevó a cabo gracias a los patrullajes realizados por las unidades del Modelo Nacional de Vigilancia Comunitaria por Cuadrantes. Durante la intervención, se descubrió que el licor tenía estampillas de seguridad de otro departamento y la información en etiquetas, envases, tapas y estampillas no correspondía al producto, lo que representaba un riesgo para la salud de los consumidores.


El Coronel de la Policía Metropolitana de Montería, Gabriel García, advirtió sobre los peligros del consumo de bebidas alcohólicas adulteradas, ya que suelen contener metanol, un tipo de alcohol que puede causar graves daños, incluso la ceguera o la muerte.


El licor incautado fue entregado a Rentas de la Gobernación de Córdoba. Ante este hecho, se hace un llamado a la población a adquirir sus bebidas alcohólicas en establecimientos reconocidos, desconfiar de precios demasiado bajos, revisar los empaques y prestar especial atención a las etiquetas. La seguridad y la salud de los ciudadanos deben ser una prioridad al momento de consumir cualquier producto.

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