La principal incógnita que las autoridades intentan resolver es la forma en que el cuerpo llegó al río Sinú. Se especula si fue arrastrado por la corriente desde otro lugar o si en el mismo sector de Zarabanda fue el escenario del crimen. Para ello, se están recopilando testimonios y evidencias en la zona, así como examinando posibles cámaras de seguridad cercanas que puedan haber captado movimientos sospechosos.
La comunidad local ha expresado su preocupación ante este macabro hallazgo, y las autoridades han intensificado la presencia policial en la zona para brindar mayor seguridad a los residentes. Se espera que en las próximos horas se obtengan avances significativos en la investigación y se puedan esclarecer los detalles de este lamentable suceso.
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