“Estábamos durmiendo cuando escuchamos que se estaba incendiando la casa. Nos levantamos ahí todos confundidos, nos dimos cuenta y en 10 minutos se quemó la casita con todo lo que había”, contó habitante de la calle abajo de dicho barrio.
La casa era la de los hermanos Muskus dueños de un local agropecuario. Pero allí vivían arrendado Clinger Cesar Caraballo Hernández y su familia. El día viernes, según testimonios de allegados ellos salieron de viaje a Coveñas sin imaginar lo que le esperaba.
“A quien dejamos cuidando la vivienda nos llamó para informarnos que la casa se estaba incendiando, y que no había sacado nada”, indicó el afectado por el incendio.
Al regresar, la casa estaba reducida en cenizas y un dinero con el cual trabajaba en una pequeña carnicería durante años también quedó incinerado, aseguró.
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